Etcheverry y Ugo Carabelli afinan su juego en Mallorca antes de Wimbledon
El ATP 250 de Mallorca se ha convertido en una parada crucial para los tenistas que buscan perfeccionar su juego sobre césped antes del inicio del prestigioso torneo de Wimbledon. Este año, la participación argentina está representada por Tomás Martín Etcheverry y Camilo Ugo Carabelli, ambos con la mirada puesta en llegar en óptimas condiciones al Grand Slam británico.
Etcheverry busca consolidar su buen momento
Tomás Etcheverry llega a Mallorca tras una notable actuación en el ATP de Halle, donde demostró su potencial al vencer a Andrey Rublev, ubicado en el puesto 14 del ranking mundial. Aunque su camino se vio truncado en cuartos de final ante Karen Khachanov, el tenista platense demostró su adaptación al césped y su capacidad para competir a un alto nivel. En su debut en el Mallorca Championships, Etcheverry se enfrentará al experimentado español Roberto Bautista Agut, un rival de peso que viene de alcanzar las semifinales en el ATP de Queens.
Este torneo marca una nueva etapa para Etcheverry, ya que será el primero que dispute sin la guía de Horacio de la Peña desde Roland Garros. En esta fase de transición, el argentino cuenta con el apoyo de Jerónimo Lanteri, quien lo ha acompañado en los torneos previos en Alemania y 's-Hertogenbosch.
Ugo Carabelli espera rival desde la qualy
Por su parte, Camilo Ugo Carabelli aguardará al ganador de la fase de clasificación para hacer su debut en Mallorca. En caso de avanzar, podría enfrentarse en segunda ronda al neerlandés Tallon Griekspoor, cuarto preclasificado del torneo, lo que representa un desafío importante en su camino hacia Wimbledon.
Un cuadro principal con figuras destacadas
El ATP de Mallorca no solo cuenta con la presencia argentina, sino que también alberga a figuras destacadas del circuito. El principal favorito, el estadounidense Ben Shelton, esperará en segunda ronda al ganador del encuentro entre su compatriota Luander Tien y el alemán Justin Engel. El torneo promete un alto nivel de competencia y emociones fuertes en la antesala de Wimbledon.