El Deportivo Madryn y el Deportivo Morón se enfrentaron en un partido de vuelta de semifinales del Reducido de la Primera Nacional cargado de tensión y polémica. El encuentro, disputado en el Estadio Abel Sastre de Puerto Madryn, definía al finalista que se enfrentaría al ganador de la llave entre Estudiantes de Río Cuarto y Estudiantes de Caseros por el ansiado ascenso a la máxima categoría del fútbol argentino.
Un Partido Marcado por la Controversia
El partido de ida, favorable al 'Gallito' por 1-0, estuvo lejos de ser pacífico. Una clara mano en el área no sancionada a favor de Madryn desató la furia del equipo visitante y encendió el debate arbitral. Pero la controversia no terminó ahí. Durante la semana, unas supuestas declaraciones del entrenador de Morón, Walter Otta, criticando duramente a la dirigencia de la AFA y al propio Madryn, generaron un terremoto en el ambiente futbolístico.
La Sanción a Otta y el Clima Caliente
A pesar de que Otta y la dirigencia de Morón negaron la veracidad de las declaraciones, el Tribunal de Ética de la AFA decidió suspender al entrenador por 30 días, impidiéndole dirigir el crucial partido de vuelta. Este hecho no hizo más que aumentar la tensión en un ambiente ya de por sí caldeado.
¿Quién se lleva el Ascenso?
Con este panorama, Morón viajó a Puerto Madryn con la misión de defender la ventaja obtenida en casa. Un empate le bastaba para clasificar a la final. Por su parte, Deportivo Madryn estaba obligado a ganar para aprovechar la ventaja deportiva y seguir soñando con el ascenso. El partido prometía ser un duelo de nervios, estrategia y mucha intensidad.
- Deportivo Madryn: Buscando revertir el resultado adverso y hacer valer su localía.
- Deportivo Morón: Con la presión de mantener la ventaja y las polémicas a su alrededor.
El encuentro no solo definía un finalista, sino que también ponía a prueba la templanza y la capacidad de ambos equipos para sobreponerse a la adversidad y la presión.
