COVID-19: Variante "Frankenstein" XFG llega a Sudamérica y Europa
Una nueva subvariante de Ómicron, apodada "Frankenstein" (XFG o Stratus), está generando preocupación a nivel mundial. Detectada inicialmente en el sudeste asiático, la variante se ha propagado rápidamente a varios países, incluyendo Brasil (Río de Janeiro, San Pablo, Ceará y Santa Catarina) y España (Canarias), y se encuentra bajo vigilancia por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
¿Qué sabemos de la variante "Frankenstein" XFG?
La variante XFG es una recombinación de dos subvariantes de COVID-19 (LF.7 y LP.8.1.2), lo que le ha valido el apodo de "Frankenstein". Esta recombinación significa que el virus ha combinado material genético de diferentes cepas, creando una nueva versión.
Según el Instituto Oswaldo Cruz de Brasil, la cepa fue identificada en 46 casos de covid-19 diagnosticados entre el 1 y el 8 de julio, lo que representa el 62% de los genomas analizados durante el periodo mencionado.
¿Es más peligrosa?
Aunque la variante XFG se está propagando rápidamente, los estudios iniciales sugieren que no causa una enfermedad más grave. Álvaro Torres, jefe de la Unidad de Vigilancia de la Dirección General de Salud Pública del Servicio Canario de la Salud (SCS), informó que en Canarias no se ha percibido que los cuadros sean más graves, aunque afecta principalmente a las vías respiratorias altas, causando dolor de garganta intenso, afonía y mucha mucosidad nasal.
La OMS la ha clasificado como una variante bajo vigilancia, considerando que el riesgo asociado es bajo. No hay evidencia de un aumento en la gravedad clínica ni de un impacto significativo en la eficacia de las vacunas y los antivirales.
Situación en Argentina
Aunque aún no se ha confirmado su presencia en Argentina, la baja secuenciación genómica del virus dificulta su detección. Expertos señalan la importancia de intensificar la vigilancia para monitorear la propagación de esta y otras variantes.
Recomendaciones
A pesar de que la variante XFG no parece ser más grave, es importante mantener las medidas de precaución habituales, como el lavado de manos frecuente, el uso de mascarilla en espacios cerrados y la vacunación contra el COVID-19.