La causa Cuadernos de las Coimas sigue generando controversia y nuevas revelaciones, mientras el juicio oral avanza de manera virtual. Esta semana se sumó una nueva audiencia donde se continuó con la lectura del requerimiento de elevación a juicio, detallando la presunta maniobra criminal y el rol de Cristina Fernández de Kirchner junto a los otros 85 imputados.
Una confesión clave, la de Fabián Gutiérrez, exsecretario privado de Cristina Kirchner (asesinado en 2020), que no había sido leída anteriormente, ahora emerge como una prueba fundamental para determinar el presunto rol de la ex mandataria en la estructura de sobornos. Esta declaración se suma a las críticas ya existentes sobre la causa, donde juristas, políticos y organismos de derechos humanos han advertido sobre posibles irregularidades que comprometerían garantías constitucionales básicas.
El fiscal federal Carlos Stornelli, al elevar la causa a juicio oral, afirmó que la investigación se centró en la conformación de una asociación ilícita integrada por las más altas esferas estatales. Según Stornelli, las circunstancias de tiempo, modo y lugar, relatadas por personas con conocimiento directo de los hechos, sustentaron la línea investigativa.
El esquema de recaudación ilegal
La Justicia determinó la existencia de un sistema de recaudación de dinero orquestado por funcionarios públicos del Poder Ejecutivo, quienes habrían establecido acuerdos con empresarios a cambio de beneficios recíprocos. Este esquema habría beneficiado tanto a los funcionarios, que garantizaban su permanencia en el poder y obtenían beneficios personales, como a los empresarios, que recibían favores en acuerdos y contratos con la Administración Pública Nacional.
Además, la confesión de Ernesto Clarens, financista cercano a Lázaro Báez, reveló detalles sobre la recaudación de fondos ilícitos. Clarens declaró que recaudaba aproximadamente 300.000 dólares semanales por orden de Néstor Kirchner, encargándose de cambiar pesos por dólares y trasladar los fondos. Esta revelación, sumada a las ya existentes, complica aún más la situación de Cristina Fernández de Kirchner en la causa.
La causa Cuadernos ha sido objeto de controversia, con acusaciones de lawfare, falta de imparcialidad judicial y exposición mediática parcial del caso. La defensa de Cristina Fernández de Kirchner ha denunciado la ausencia de pruebas directas en su contra y la desigualdad en el tratamiento de la prueba. El debate sobre la validez y la justicia de este proceso judicial continúa abierto.