Tormentas Azotan Argentina: Alerta Naranja y Riesgos Climáticos

Tormentas Azotan Argentina: Alerta Naranja y Riesgos Climáticos

El fin de semana en Argentina se vio marcado por una intensa actividad climática, con alertas emitidas por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) que abarcaron desde la Ciudad de Buenos Aires y el Gran Buenos Aires hasta diversas provincias del interior. El sábado, un día que comenzó con un clima casi primaveral, rápidamente dio paso a la amenaza de tormentas, concretándose con fuertes lluvias y ráfagas de viento intensas durante la noche.

Alerta Amarilla y Naranja: ¿Qué Significan?

El SMN emitió alertas de nivel amarillo y naranja. La alerta amarilla implica la posibilidad de fenómenos meteorológicos con capacidad de daño y riesgo moderado. En cambio, la alerta naranja advierte sobre fenómenos peligrosos para la sociedad, la vida, los bienes y el medio ambiente. Esto implicó para los residentes tomar precauciones adicionales y mantenerse informados sobre la evolución de las condiciones climáticas.

Provincias Afectadas y Fenómenos Esperados

Las provincias bajo alerta naranja incluyeron zonas de Buenos Aires, La Pampa, Santa Fe, Córdoba y San Luis. Estas áreas enfrentaron la mayor amenaza de tormentas severas. Las alertas amarillas se extendieron a otras regiones, como Mendoza, San Juan y La Rioja. Los fenómenos esperados incluyeron:

  • Abundante caída de agua en cortos períodos.
  • Frecuente actividad eléctrica.
  • Caída de granizo.
  • Intensas ráfagas de viento que podrían alcanzar los 90 km/h.

Se preveían valores de precipitación acumulada entre 20 y 50 mm, pudiendo ser superados puntualmente.

Recomendaciones ante la Alerta

Ante esta situación, las autoridades recomiendan a la población mantenerse informada a través de los canales oficiales del SMN y tomar las precauciones necesarias para evitar accidentes. Se aconseja evitar actividades al aire libre durante las tormentas, asegurar objetos que puedan ser arrastrados por el viento y mantenerse alejados de zonas inundables.

La situación climática demandó una respuesta coordinada entre los diferentes niveles de gobierno para garantizar la seguridad de la población y minimizar los daños materiales.