Jubilados: Un Bono Congelado que Profundiza la Crisis
Los jubilados argentinos enfrentan una situación económica cada vez más crítica. A pesar de la inflación persistente, el bono de $70.000 pesos, una ayuda crucial para complementar sus ingresos, permanece congelado desde marzo de 2024, al inicio de la gestión de Javier Milei. Esta medida, según el Centro de Economía Política Argentina (CEPA), implica un ajuste significativo para este sector vulnerable.
CEPA estima que, si el bono se hubiera actualizado al mismo ritmo que los haberes jubilatorios, en noviembre de 2025 debería alcanzar los $173.407. La diferencia, que supera los $103.000 mensuales, representa una pérdida considerable para los jubilados de la mínima.
Aumento Insuficiente y Poder Adquisitivo en Declive
Si bien las jubilaciones aumentarán un 2,1% en noviembre de 2025, acorde a la movilidad jubilatoria que ajusta mensualmente por inflación, este incremento resulta insuficiente para compensar la pérdida de poder adquisitivo. Con el bono sin actualización, el haber mínimo (con bono) alcanzará los $403.151. Sin embargo, en términos reales, descontando la inflación, las jubilaciones mínimas (con bono) se mantienen un 6,1% por debajo de noviembre de 2023 y un 3,7% inferiores a noviembre de 2024.
El gobierno de Javier Milei oficializó mediante el Decreto 771/2025, una compensación económica de $70.000 en noviembre con el objetivo de reforzar los ingresos del sector. Además, la Anses otorgará también en noviembre un aumento del 2,88% por la inflación registrada en septiembre. El haber mínimo jubilatorio será de $333.052,70 y el máximo alcanzará los $2.154.737,06.
¿Quiénes Reciben el Bono?
El bono de $70.000 está destinado a:
- Jubilados y pensionados del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA).
- Titulares de las Pensiones No Contributivas (PNC).
- Titulares de la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM).
Para acceder al bono, es necesario cobrar una jubilación mínima, equivalente a $333.052,70.
El Futuro Incierto de las Jubilaciones
La situación actual plantea interrogantes sobre el futuro de las jubilaciones en Argentina. La falta de actualización del bono, sumada a la inflación persistente, erosiona el poder adquisitivo de los jubilados y los sumerge en una mayor vulnerabilidad. La política de bonos discrecionales, según declaraciones del presidente Milei, genera incertidumbre y dificulta la planificación económica de este sector de la población.