El cometa interestelar 3I/ATLAS, un objeto de proporciones similares a Manhattan, ha generado un intenso debate en la comunidad científica. Inicialmente, exhibió una extraña "anti-cola", una característica inusual que desconcertó a los astrónomos. Ahora, nuevas imágenes revelan la presencia de una cola cometaria tradicional, lo que ha alimentado especulaciones sobre su verdadera naturaleza.
¿Un Cometa o Algo Más?
Avi Loeb, astrofísico de Harvard, ha propuesto una hipótesis audaz: 3I/ATLAS podría ser una nave espacial alienígena realizando maniobras controladas. La transición de una anti-cola a una cola, según Loeb, podría indicar un proceso de frenado, donde la anti-cola representaría el impulso inicial y la cola, la fase posterior a la desaceleración.
La composición de la anti-cola también es intrigante. Contenía dióxido de carbono, agua y trazas de cianuro, pero lo más sorprendente fue la presencia de una aleación de níquel nunca antes vista en la naturaleza, solo utilizada en la fabricación humana. ¿Podría ser evidencia de tecnología extraterrestre?
El Cometa en Trayectoria Hacia el Sol
3I/ATLAS se dirige rápidamente hacia el Sol, acercándose a su perihelio (punto más cercano al Sol) el 30 de octubre de 2025. Se espera que alcance una distancia de 1.8 unidades astronómicas (UA) de la Tierra, lo que lo hará visible con pequeños telescopios antes de desaparecer nuevamente en la oscuridad del espacio interestelar.
¿Maniobras Ocultas?
Curiosamente, el perihelio de 3I/ATLAS ocurrirá solo 8 días después de su conjunción solar (cuando se encuentra detrás del Sol desde nuestra perspectiva), un período en el que será imposible observarlo desde la Tierra. Algunos sugieren que este momento estratégico podría ser propicio para maniobras que busquen aprovechar el efecto Oberth, un fenómeno que permite la máxima eficiencia energética al realizar ajustes orbitales cerca de un objeto masivo.
La Red Internacional de Advertencia de Asteroides (IAWN) ha incluido a 3I/ATLAS en su lista de objetivos y lo está monitoreando de cerca. Si bien no representa una amenaza para la Tierra, este cometa interestelar ofrece una oportunidad única para la investigación científica y la comprensión de los objetos que viajan entre las estrellas.
Próximos Pasos
El Telescopio Espacial James Webb de la NASA ya ha observado 3I/ATLAS, y los datos recopilados podrían arrojar más luz sobre su composición y origen. La comunidad científica espera ansiosamente los resultados de estos análisis para desentrañar los misterios de este enigmático visitante interestelar. ¿Es solo un cometa, o algo mucho más extraordinario?