Día de la Raza: ¿Racismo o Diversidad? La polémica de Milei al rojo vivo

Día de la Raza: ¿Racismo o Diversidad? La polémica de Milei al rojo vivo

Día de la Raza: Un debate que divide a la Argentina

El gobierno de Javier Milei ha reinstalado la conmemoración del “Día de la Raza”, una decisión que ha reavivado el debate sobre el racismo y la diversidad cultural en Argentina. Mientras algunos sectores celebran la reivindicación de la identidad hispana, otros denuncian una visión sesgada de la historia que ignora la opresión de los pueblos originarios.

La medida ha sido interpretada como una provocación por parte del gobierno, que también ha generado controversia por su negación del cambio climático y su reivindicación de la última dictadura militar. Para muchos, esta reinstalación del “Día de la Raza” es una expresión de un país construido sobre jerarquías raciales, donde lo blanco sigue siendo el límite estructural del poder político.

¿Un feriado para reflexionar o para celebrar el colonialismo?

El feriado del 12 de octubre, trasladado al viernes 10 para fomentar el turismo, se presenta como una oportunidad para reflexionar sobre la diversidad cultural. Sin embargo, para algunos críticos, la celebración encubre una visión eurocéntrica de la historia que minimiza el genocidio de los pueblos originarios y la persistencia del racismo en la sociedad argentina.

La discusión se centra en si el “Día de la Raza” debe ser un día para celebrar la llegada de los españoles a América o para reflexionar sobre las consecuencias de la conquista y la necesidad de construir una sociedad más inclusiva y respetuosa de la diversidad cultural.

Las críticas al “blanqueamiento” de la historia

Algunos analistas señalan que la historia argentina ha sido contada desde una perspectiva blanca, que ha invisibilizado la contribución de los pueblos originarios y de otras culturas a la construcción de la identidad nacional. Se critica la idea de que “gobernar es poblar”, que en realidad significó “gobernar es blanquear”, promoviendo la inmigración europea y el desprecio por lo autóctono.

En este contexto, la reinstalación del “Día de la Raza” es vista como un intento de reafirmar una visión tradicional de la historia que niega la diversidad cultural y la persistencia del racismo en la sociedad argentina.