¿Intervención o Sumisión? EEUU Rescata la Economía Argentina
Un giro inesperado sacude la economía argentina. El secretario del Tesoro de EE.UU., Scott Bessent, anunció una intervención sin precedentes en el mercado cambiario local, con la compra directa de pesos y un acuerdo de swap con el Banco Central por 20.000 millones de dólares. ¿Se trata de un respaldo a las políticas de Javier Milei o una cesión de soberanía?
La administración Trump, a través de Bessent, parece tomar las riendas de la política económica argentina. Esta acción, calificada como un rescate por algunos, genera interrogantes sobre las condiciones reales del acuerdo y las contraprestaciones exigidas, más allá del compromiso de “alejarse de China”.
¿Fuga de Capitales Especulativos?
Fuertes rumores en medios estadounidenses sugieren que la intervención busca facilitar la salida de capitales especulativos atrapados en bonos de la deuda pública. Si esto fuera cierto, estaríamos ante una operación de corto plazo, beneficiando la fuga de inversores a costa de la estabilidad económica del país.
El Mensaje de Wall Street
El mantra de Wall Street, “No pelees con la Fed”, se actualiza: “No te enfrentes con Trump”. La intervención busca disuadir a quienes apostaban a una devaluación post-elecciones legislativas, inyectando dólares para mantener la calma en el mercado cambiario.
Milei elogiado por EEUU: ¿Un faro anti-China?
Bessent elogió a Milei como un “faro en América Latina” y un aliado clave de EE.UU., destacando su compromiso de “sacar a China de Argentina”. Este alineamiento estratégico levanta cejas, considerando las relaciones comerciales y geopolíticas de Argentina.
La intervención del Tesoro estadounidense, aunque celebrada por el gobierno de Milei, plantea interrogantes sobre la autonomía económica y la verdadera naturaleza de esta “ayuda”. ¿Es un salvavidas o una camisa de fuerza?
Además, recientemente han surgido acusaciones de corrupción que involucran indirectamente a figuras cercanas al gobierno, como Karina Milei, en un escándalo relacionado con la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS). Estas acusaciones, aunque no formalmente imputadas, añaden tensión al panorama político y económico.