¡Revancha explosiva! Alex "Poatan" Pereira demostró que su anterior derrota ante Magomed Ankalaev fue solo un mal recuerdo. En el UFC 320 en Las Vegas, el brasileño necesitó apenas 1 minuto y 20 segundos para noquear al ruso y recuperar el cinturón de peso medio-pesado.
Un KO para la historia
Desde el campanazo inicial, Poatan salió con todo. Acortó distancias rápidamente y conectó jabs y directos que mantuvieron a Ankalaev contra la jaula. La presión constante rindió frutos: un cruzado de derecha demolió al ruso, quien intentó un derribo desesperado. Poatan respondió con una lluvia de codazos implacables que obligaron al árbitro a detener la pelea.
Sin rencores, solo victoria
Tras la contundente victoria, Poatan aseguró que no hubo sed de venganza, aunque repitió su burlesca celebración apuntando al derrotado, imitando al influencer Khaby Lame. "La venganza nunca es plena, mata el alma y envenena. No es venganza. Yo estaba preparado esta vez. Lo dije a todo el mundo y nadie creyó: no estaba en condiciones y ahora sí. No me sorprendió, lo tenía desde la primera pelea. No soy de dar excusas, pero lo dije: no estaba bien. Hoy estoy bien, y lo probé a todo el mundo", declaró Poatan.
El recuerdo de la primera pelea
En su primer enfrentamiento, Ankalaev había superado a Poatan por decisión unánime. Sin embargo, esta vez la historia fue diferente. Poatan, visiblemente recuperado y enfocado, no dio oportunidad a su rival.
- Primer round: Poatan dominó con golpes de pie y lastimó a Ankalaev con patadas bajas.
- Segundo round: Intercambio intenso, con Ankalaev casi noqueando a Poatan al final.
- Tercer y Cuarto round: Ankalaev presionó y llevó la pelea al suelo.
Esta vez, Poatan no permitió que la pelea llegara a la decisión de los jueces. Con un KO espectacular, recuperó el cinturón y demostró que sigue siendo el rey de los medio-pesados.