Salta se Hunde en la Fe: El Milagro 2025 Desborda Emoción y Devoción
Salta se vistió de gala para celebrar la tradicional fiesta del Señor y la Virgen del Milagro, una manifestación de fe que atrajo a cientos de miles de peregrinos de toda Argentina y países vecinos. La ciudad se convirtió en un hervidero de devoción, con peregrinos llegando desde rincones lejanos, recorriendo kilómetros a pie, a caballo o en bicicleta, cumpliendo promesas y renovando su pacto de fidelidad.
La celebración, que tiene raíces en el siglo XVII, conmemora la protección divina ante los terremotos que azotaron la región. Este año, en medio de la incertidumbre económica y las tensiones políticas que vive el país, la fiesta adquirió un significado aún mayor, como un refugio de esperanza y unidad.
El arzobispo Mario Cargnello hizo un llamado a la reflexión y a la búsqueda de la paz, pidiendo un alto a los insultos y a la división. Sus palabras resonaron en la multitud, que encontró en la fe un motivo para seguir adelante y construir un futuro mejor.
Un Pacto que Trasciende la Religión
El Milagro no es solo una fiesta religiosa, sino también una expresión cultural y social que interpela a la política. La renovación del pacto de fidelidad, un acto central de la festividad, es un compromiso con los valores de la solidaridad, la justicia y la paz. Los peregrinos, con su esfuerzo y su devoción, dan un ejemplo de perseverancia y esperanza que inspira a toda la sociedad.
- La fiesta del Milagro es una tradición arraigada en la historia y la cultura de Salta.
- Atrae a miles de peregrinos de todo el país y países vecinos.
- Es una manifestación de fe, esperanza y unidad.
- Interpela a la política y promueve valores como la solidaridad y la justicia.
En definitiva, el Milagro 2025 fue una demostración de la fuerza de la fe y la importancia de mantener vivas las tradiciones que nos unen como pueblo. Una fiesta que invita a la reflexión y a la construcción de un futuro mejor para todos.