La 77ª edición de los Premios Emmy será recordada por mucho más que los galardones. Hannah Einbinder, la estrella de la serie 'Hacks', se alzó con el premio a Mejor Actriz de Reparto en una Serie de Comedia, pero su discurso de aceptación generó controversia y dividió opiniones.
Un Discurso Inesperado
Einbinder, de 30 años, tras agradecer a los creadores de 'Hacks' por 'cambiar mi vida en todos los sentidos imaginables', sorprendió a la audiencia al gritar: '¡Vamos Eagles, que se joda ICE y Palestina libre!'. La referencia a los Philadelphia Eagles, que habían ganado su partido de fútbol americano, fue seguida por una crítica a las redadas de inmigración del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) de Estados Unidos y un llamado a la liberación de Palestina.
Repercusiones y Justificaciones
El discurso de Einbinder superó el límite de tiempo permitido, lo que resultó en una reducción de la donación de 100.000 dólares que el presentador Nate Bargatze había prometido al Boys & Girls Clubs of America. Sin embargo, la actriz aseguró que pagaría la diferencia.
En el backstage, Einbinder profundizó en sus motivaciones para abordar el conflicto palestino-israelí. 'Es mi obligación como judía distinguir a los judíos del Estado de Israel', declaró, subrayando su postura en un tema que genera intensos debates.
Reacciones Divididas
La declaración de Einbinder provocó una ola de reacciones en redes sociales, con usuarios que la apoyaron por alzar su voz sobre un tema sensible y otros que la criticaron por politizar un evento de entretenimiento. Javier Bardem, presente en la alfombra roja de los Emmy, también mostró su solidaridad con Palestina, sumándose a las voces que buscan visibilizar la situación.
Además de Einbinder, otras actrices como Catherine O’Hara y Kathryn Hahn (por The Studio), Jessica Williams (por Shrinking), Liza Colón-Zayas (por The Bear) y Janelle James y Sheryl Lee Ralph (por Abbott Elementary) también fueron nominadas en la misma categoría.
El discurso de Hannah Einbinder sin duda dejó una marca en los Emmy 2025, convirtiéndose en uno de los momentos más comentados y generando un debate necesario sobre la libertad de expresión y la responsabilidad social de las figuras públicas.